En Francia, Tratan mal a actor mexicano

El actor mexicano Rubén Sosa recibió una gran humillación por supuestas medidas de seguridad a su llegada al Aeropuerto Internacional de Niza Cannes, donde fue víctima de malos tratos por parte de la policía local.

El joven histrión llegó a Cannes como parte del elenco del filme mexicano "Los Bastardos", de Amat Escalante, que compite en la sección "Una cierta mirada", sin embargo la autoridad no creyó que fuera parte de una película participante en el famoso festival.

En entrevista con el diario Reforma, Rubén Sosa denunció que lo trataron con racismo o como si fuera un terrorista, donde tres policías, una mujer y dos hombres, lo detuvieron sin darle ninguna explicación.

"Fue discriminación. Yo tenía todo bien, el pasaporte y todo... era uno de los últimos pasajeros del avión. Ya tenía la maleta, ya iba de salida cuando tres policías me pararon. Me pidieron el pasaporte, lo volteaban, veían la foto, me preguntaron a qué venía. Uno de ellos hablaba un poco de español y le dije que venía al festival, pero no me creyó; se rió. Me pidió una prueba, pero no tenía nada, sólo le dije que me estaban esperando afuera para llevarme al festival, pero no me quiso creer.

"Al que hablaba un poco español le pedí que me dejara hablar con el productor de la película para que le explicara, pero sólo se reía. Entonces, me dijeron que abriera la maleta y empezaron a esculcar todo", dijo.

Sosa señaló que al no encontrarle nada en su equipaje, los policías desarmaron su maleta.

"Además, me dijeron que me quitara los tenis... luego me metieron a un cuarto y me dijeron que me quitara la ropa y checaron todo lo que traía. Como no encontraron nada, estaban bien enojados y no sé qué tanto decían", indicó.

Jamás supo lo que buscan, si armas o drogas, pero finalmente, al no comprobarle nada, lo dejaron ir tras hora y media. "Me sentí humillado. Nunca me había pasado algo así, ni en México".

Tras el trago amargo, salió del aeropuerto donde el representante del festival y el chofer que lo esperaban ya estaban desesperados, pues no lo encontraban.

"Pero los policías no me soltaban, me siguieron al exterior para ver lo que hacía. Ni siquiera cuando vieron que efectivamente me estaban esperando y que me subí en un auto, me dejaron tranquilo. Nos fueron siguiendo por la carretera hasta la entrada a Cannes".

El joven señaló que está pensando en la posibilidad de demandar a los tres policías.

"Al que habla español sí lo reconozco. Pero no sé, igual es como en México, que la demanda no sirve para nada, luego no les hacen nada y uno solo con el coraje".

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