Destacan amenazas y fracasos de fundamentalismo de Bush

Por Roberto Pérez Betancourt

Las amenazas y fracasos del fundamentalismo guerrerista de la actual Administración norteamericana fueron evidenciados hoy en Mesa Redonda Informativa de la radio y la televisión cubanas.

Panelistas pasaron revista este jueves a recientes hechos de la guerra de agresión contra Iraq, cuyo rechazo por parte del pueblo estadounidense continúa en ascenso, mientras la popularidad de W. Bush cae en picada.

Trascendió que el continuo accionar de la resistencia iraquí ha ocasionado más de mil 870 muertos y alrededor de 14 mil heridos a las fuerzas norteamericanas invasoras desde el inicio de la agresión, y millares de iraquíes han perecido.

Mientras W. Bush rechaza públicamente a los activistas antibélicos y se esfuerza en elogiar la cruzada de exterminio llevada a cabo por él en países islámicos, sondeos de opinión afirman que la mayoría de los norteamericanos no respalda ese aventurerismo y reclama el retorno de sus soldados a casa.

El Presidente tuvo que hacer un alto en sus vacaciones para viajar a varios estados donde intentó defender su guerrerismo, invocando por vez primera a los soldados muertos, y anunció el envío de mil 500 militares más a Iraq.

Congresistas estadounidenses critican esos discursos, insisten en los errores cometidos y constatan más de seis mil desertores entre los enviados a guerrear.

Analistas recordaron que numerosos políticos aspiran a la reelección e las elecciones del año 2006 y se preocupan ante la posibilidad de perder posiciones por el voto de castigo.

La situación política en Iraq, tutorada por los ocupantes norteamericanos, evidencia contradicciones internas entre facciones para aprobar una nueva constitución.

El propósito es crear tres estados de carácter federativo, correspondientes a las etnias kurda, chiíta y sunnita, lo que es origen de serios problemas y caldo de cultivo para futuras guerras civiles, estiman analistas.

En Afganistán este año ha resultado el más mortífero para las tropas norteamericanas con 74 militares muertos, de los 228 contabilizados desde octubre de 2001, y expertos afirman que la violencia se ha ido recrudeciendo.

Hay ocho mil 500 candidatos aspirantes a curules de la proyectada Asamblea Nacional, muchos de ellos vinculados a grupos armados llamados "señores de la guerra" en Afganistán, donde las elecciones carecerán de garantías y costarán 159 millones de dólares sin incluir gastos de seguridad.

En la Mesa Redonda se comentó el especial destaque que ha tenido la gestión movilizadora contra la guerra por parte de la señora Cindy Sheehan, madre del soldado Casey, muerto en Iraq, quien desde hace semanas organizó vigilias frente a la hacienda de W. Bush, en Crawford, Texas, a la que se han unido cientos de personas más.

Actividades semejantes se han multiplicado en más de mil localidades de los Estados Unidos..

Analistas hacen notar que en las últimas encuestas el porcentaje de aprobación a la gestión de Bush aparece en sus límites más bajos desde el año 2001, entre el 36 y el 40 por ciento, incluidos los temas de guerra, economía, sistema de jubilación y otros de política local.

Los panelistas también comentaron la creciente ola de repudio mundial por parte de organizaciones religiosas y laicas, sobre declaraciones televisadas del republicano evangelista Pat Robertson, dirigente de un poderoso grupo de presión de la extrema derecha, quien llamó el martes último a asesinar al presidente venezolano Hugo Chávez.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela, la Organización de Naciones Unidas y la mayoría de la prensa estadounidense rechazaron tales incitaciones, calificándolas con dureza, y se destacó que prédicas extremistas de Robertson se difunden en 200 países en 70 idiomas.

Aunque tarde, ante la andanada de protestas el Gobierno estadounidense se desmarcó de las opiniones del multimillonario, quien intentó modificar sus declaraciones, aunque sin credibilidad, porque su explícito llamamiento al magnicidio de Chávez fue grabado y reproducido por varias cadenas de televisión.

En declaraciones telefónicas a la Mesa Redonda, Ramsey Clark, ex fiscal general de Estados Unidos, afirmó que el movimiento antiguerrerista cobra fuerza en su país y esperan realizar una gran manifestación el 24 de septiembre próximo en Washington.

Añadió que será la mayor movilización desde marzo de 2003, cuando comenzó la guerra de agresión de W. Bush, y dijo que intentan sacar del poder al mandatario y sus seguidores a través de procedimientos constitucionales. La Habana, 25 sep (AIN)